01Mar

Bienvenidos a un nuevo año escolar

Deseamos que como familia sea para ustedes una nueva etapa en la que seguir diseñando juntos el proyecto vital de cada uno de sus hijos.

El espacio del colegio es una de las tantas hojas en blanco en las cuales los alumnos tienen la posibilidad de trazar sus propias líneas, descubrimientos, conocimientos y sentimientos… sus aprendizajes.Los invitamos a observar atentamente esos trazos que van definiendo el ser de cada uno de ellos. Tengamos presentes, éstas y otras preguntas, para detenerse y pensar:

¿Qué novedades encuentro en sus dibujos, escrituras, bailes, deportes o ideas?

¿Qué habilidades de pensamiento va adquiriendo?

¿Qué capacidades de creación de vínculos o resolución de conflictos sociales logra?

¿Cómo se está organizando, va siendo más autónomo?

Observarlos para que a partir de la manifestación de sus cualidades, podamos ayudarlos a conocerse y a transitar espacios tanto en el colegio como en otros ámbitos, que le permitan llegar a ser más plenos. Seamos testigos del crecimiento de éstas y otras cualidades de sus hijos, y busquen oportunidades para hacerlos conscientes de estos aprendizajes. Poner la mirada en ellos y poner en palabras estos logros para que florezcan aún más.

Desde el Saint Mary of the Hills proponemos y entendemos la excelencia como un camino hacia el mayor despliegue de cada uno de sus hijos; generamos trayectos escolares en los que buscamos que lleguen a ser hombres y mujeres que vivan los valores de la Fe cristiana y sean capaces de emprender nuevos caminos a la luz del perfil institucional que los acompaña en cada año. Habrá siempre desafíos a conquistar; como educadores sabemos la fuerza transformadora que es “traducir” esas debilidades en  oportunidades  de mejora para seguir creciendo persiguiendo metas alcanzables y que sus hijos adquieran la autoestima necesaria a medida que va siendo más partícipe de esos desafíos.

En nuestra vida académica seguimos innovando con programas como el IPC (Internacional Primary, Curriculum) que continua con el IMYC (International Middle Years Curriculum), y ajustando aspectos de los dos programas de los años superiores con mayor trayectoria en el Saint Mary como el I.G.C.S.E. (International General Certificate of Secondary Education) y el Diploma del IB (International Baccalaurate). Estos programas brindan enfoques de la enseñanza y el aprendizaje que nos permiten implementar prácticas pedagógicas más inclusivas y desarrollar una mentalidad internacional atenta a los contextos locales y globales, para seguir creciendo en habilidades y en la comprensión del contenido.

Deseamos que este camino de sus vidas se desarrolle en un clima de disfrute, quien aprende en un clima lúdico y emocionante, aprende mejor. Las emociones y el juego ocupan un rol significativo dentro de las aulas, esto nos ha llevado a profundizar las prácticas que les permitan a sus hijos conocer y reconocer sus emociones y las de los demás. Atender a las mismas, les permitirá ser personas más íntegras y armónicas. El juego proporciona placer y felicidad, en él los niños tienen menos miedo al error, se fomenta la creatividad, la creación de estrategias y la colaboración con otros. Es a través de material concreto que los niños acceden a la abstracción que supone las matemáticas, o de las reglas de un deporte que se inicia en la formación de virtudes. Aprender en un medio de juego desde chicos, es un desafío, y una meta que nos proponemos en el Saint Mary.

Pedimos a la Virgen María que nos ilumine y acompañe en el camino, para que toda la comunidad del colegio, aprenda para la vida.

                           Graciela B. de Xanthopoulos       ​Mariana Xanthopoulos